nació sin que lo buscase, sólo sé, que me atrapó.
Cómo poder explicar, lo que nació desde el Alma,
Alma que entrega la dicha, y también desolación.
Muchas veces yo quisiera de mi lado separarte,
más este olvido no parte, de ninguna decisión.
Es tal vez como el destino me provoca sin salida,
cuando busco en la partida, calmar esta desazón.
Yo sé que en esta ocasión, nada ni nadie podría,
aliviar alguna herida, pues parte del corazón .
Un corazón prisionero, hace tiempo, de tus ojos,
que no busca ningún cambio, ni necesita opinión.
Vuelvo a volar en tus brazos, te imagino lentamente,
tratando no estar ausente, cuando más te necesito .
Pido a Dios que en este ciclo de dudas que no tolero,
alivies mi desconsuelo, pues no se vivir, sin vos.
El diablo pone la cola, en esta huída tan breve,
que si está bien o no debes soñar en la soledad.
Pero quimeras asoman, cuando siempre tu figura,
deslumbra entre mis dudas, cuando digo nunca más.
Como no me siento Dios, ni lo soy ni lo pretendo,
solo a mi ser, yo reprendo, a veces , por este amor.
Escrito en letras de fuego, en silencio desmedido,
pues nació sin que el olvido, pueda ni sorbo probar.
Si, te quiero sin pensar, cuantas veces he sufrido,
por amarte así querido, ya nada puedo cambiar.
Es desearte mi verdad, no se si buena o si mala,
pero a nadie pido nada, con esta verdad quedaré.
No hay comentarios:
Publicar un comentario